No puedo lidiar con el sabor amargo que me dejan tus silencios, las distancias repentinas y el frío de esos ojos que tiempo atrás me miraban llenos de luz. Todo se torna inestable y vos tan indescifrable que asusta. No sé si soy yo, vos o alguien más; si somos los dos o no es nadie, pero lastima tanta incertidumbre.
La sensación de que vivís aferrado al espejo retrovisor y jamás vas a soltarlo, porque nunca vas a dejar ir aquella herida de amor que fue amor, me aleja a pasos agigantados. Hace que todo lo que tengo para darte se vea pequeño e insuficiente.
Palabras vacías, abrazos que ya no irradian calor y caricias sin piel febriciante. Ayer, por primera vez, sentí que ya no me querías..
Palabras vacías, abrazos que ya no irradian calor y caricias sin piel febriciante. Ayer, por primera vez, sentí que ya no me querías..
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